martes, 9 de abril de 2024

Cuando alguien se nos va

Como reconcilias lo que sabes con lo que sientes cuando no están en acuerdo? Como te deshaces de esa presión en el pecho que decidió alojarse ahi y no quiere oír de razones? 

Vivimos en un mundo en donde lo civilizado es seguir lo que sabes y dejar de lado lo que sientes. Al menos no actuar en consecuencia. Esa tendencia Vulcana es muy difícil de seguir cuando, como yo, consideras que la única manera de salir es viviendo a fondo lo que la experiencia trae para ti. Sí, soy de aquellos locos que para pasar deciden arremeter de frente al huracán. Cierto, hay el riesgo de que te acabe pero si sales victorioso, si cruzas por donde los demás no se atreven, saldrás no solo victorioso sino transformado. Sí, realmente creo que para salir más fácil hay que tocar fondo para tener de dónde empujarse para salir mas alto y mejor. El descenso es difícil y peligroso pero una vez con el impulso del fondo el escape sera mas limpio y claro. Es la única manera de escapar de las animas de la noche. No las puedes evitar, las tienes que enfrentar. Es un camino tortuoso pero ya lo habíamos discutido antes, es necesario. Y aquí estoy de nuevo topándomelas de frente. Me deben saber un adversario digno porque en esta ocasión les tomo casi 10 años llegar a mí. Fueron tomando pasos estratégicos, fueron acercándose poco a poco. Las percibía, sabia que ahi estaban, acechándome, esperando el momento oportuno. Así es, 10 años de golpes bajos, 10 años de perdidas continuas. En los últimos años he visto cómo la tela de mi vida se va adelgazando, poco a poco ha ido perdiendo algunos de sus hilos principales. Esos que das por hecho, esos que sabes que están ahi aunque no los merezcas. Esos que tan solo la muerte puede arrancar del telar. 


En esta ocasión las situación es un poco más complicada. Es un dolor profundo. El dolor de la pérdida de aquel al que educaste, cuidaste y viste crecer. Sin embargo, la mayor parte de los que te rodean no lo ven así. Piensan que es una perdida menor por pertenecer a otra especie. Sí, se me fue mi cachorrito, aquel que se comió tantas cosas que no debía. Aquel que hace 12 años rescatamos de los brazos de la muerte. Aquel que tan rápido y con tanto gusto aprendió todo aquello que le enseñé. Aquel al que le cante tantas noches para que se durmiera. Aquel que compartía mis colaciones vegetarianas. Aquel que disfrutaba el jardín y conocía cada rincón donde el sol se depositaba. Aquel que cosechaba su chayote favorito y nos lo traía para que lo peláramos. Aquel que me guiñaba el ojo cuando nos volteábamos a ver. Aquel que me seguía hasta al baño. Aquel que disfrutaba de acurrucarse y ser apapachado. Aquel con paciencia de santo y animo de niño. Aquel que me dio tantos recuerdos que me hacen sentir amada, reír y en ocasiones hasta llorar.

Reconozco que esta perdida como tantas otras se va a quedar conmigo siempre. Sé que a ratos lloraré su ausencia como lloro las demás. Pero con el pasar del tiempo he podido encontrarle su lugar. Ese rincón en el que podemos estar juntos, ese momento en el que le dedico un ratito a decirle cuánto lo quiero y como va mi vida en su ausencia. Ese momento en el que me dejo apapachar por su presencia. Sé que suena extraño pero cada ser querido que se me ha ido ahora tiene un momento, una actividad, un espacio en donde nos encontramos. En dónde les comparto lo que ya no puedo hacer de frente, en donde puedo percibir su presencia. Sigo platicándoles aquello que me emociona, aquello que me duele e incluso lo mucho que los extraño. No me contestan pero sé que me escuchan, que me ven y los siento a mi lado. En ocasiones me visitan en sueños y me advierten. Tristemente no soy tan experimentada y no siempre puedo entender sus advertencias. En ocasiones los veo entre las personas, por instantes, recordándome que me quieren y me cuidan. A veces los veo en la naturaleza en donde estoy emocionada y contenta o viviendo una nueva aventura. Algunas veces en mis actividades diarias o cuando hago algo que me enseñaron o algo que compartíamos. 

Contestando esas primeras preguntas, pienso que los sentimientos y los pensamientos se reconcilian con la experiencia. Como mencioné antes, viviendo lo que tienes que vivir a fondo. En este mes he llorado, he enloquecido, he observado, he reflexionado, he recordado y encontré un lugar para poner todo esto que siento. Solo a través de vivir y entender lo que esta pasando es que pude conciliar mis dos partes y ponerlas en paz. En adelante mi mente comprenderá que mi corazón necesita estar en momentos y situaciones que no comprende pero que le permite vivir feliz. 

Así es como esos hilos sociales se vuelven hilos de consuelo en la soledad. Cuando el mundo se calla se puede ver la tela mas hermosa, aquella en la que la urdimbre está formada de historias completas. Algún día todos formaremos parte de esta tela y comprenderemos cómo es que podemos dar cobijo y consuelo a aquellos que aún no forman parte de esa magnifica tela eterna.